jueves, 4 de abril de 2013

Quiksilver

Quiksilver diseña, produce y distribuye ropa, accesorios y productos para personas jóvenes de espíritu, y representa un estilo de vida casual influenciado por la cultura surf. Gigantes del deporte como el surfista Kelly Slater o Tony Hawk, uno de los mayores nombres del skate, respaldan sus productos, para demostrar no sólo la calidad sino un espíritu de aventura.

La historia comenzó en 1969 cuando el surfista australiano Alan Green comenzó a dedicarse a la fabricación de board shorts (bermudas de surf), para poder sacar lustre a su gran afición, el surf. 

John Law era otro ilustre surfista de la zona, que se asoció con Alan Green, para que ambos comezaran a desarrollar un nuevo concepto de bermudas específicas para la práctica del surf, pues echaban en falta unos trajes específicos que permitiesen más ligereza y secado rápido, además de más aislamiento, fundando Quiksilver en el año 1969 en Torquay, Australia, sin saber en aquel entonces que revolucionarían este deporte.

Puestos manos a la obra, además de buscar esos objetivos, introdujeron otra novedad en las bermudas, y es que sustituyeron la cremallera de cierre clásica por un velcro. Comenzaron a vender los productos en pequeñas tiendas especializadas en surf en los ´70. 

Ellos mismos pudieron cambiar el estado de desconfianza del resto de surfistas hacia estas prendas, demostrando que los avances introducidos realmente funcionaban.

Fue en 1974 cuando comenzaron a exportar sus productos, a las primeras tiendas en Hawaii, Estados Unidos.

En poco tiempo, sus diseños alcanzaron gran popularidad, tanta que algunos de los mejores surfistas del momento solicitaban bermudas a Quiksilver. Los primeros surfistas patrocinados por la marca fueron Wayne “Rabbit” Bartholomew, que se convertiría en campeón mundial, y Bruce Raymond.

En 1976 uno de los surfistas más aclamados Jeff Hakman, que ya estaba patrocinado por la marca, consiguió la licencia para producir y distribuir los productos de la compañía en los Estados Unidos, permitiendo el empujón definitivo a la empresa. 

Así, en 1985 grandes almacenes como Macy’s, Marshall Fields, Dayton Hudson y Dillard’s, tenían a disposición del público los artículos de Quiksilver, que alcanzaron mucha popularidad en todo el país. 

La primera tienda de la marca se abrió en la playa de Newport, California. 

Poco después, Hakman pone rumbo a Europa, y funda la división Quiksilver europea. 

A finales de los ´80 sigue su progresión imparable, patrocinando y vistiendo a los mejores surfistas: en aquel entonces, hacen una arriesgada apuesta, que la postre les convirtió en mundialmente famosos, y es que incorporaron a sus filas a un jovencísimo Kelly Slater, que en el día de hoy acumula 11 títulos mundiales.

Quiksilver comienza a patrocinar algunos de los más importantes eventos del surf a nivel mundial, como la Big Wave Invitational Series, Quiksilver Pro, y también la versión  femenina Quiksilver Roxy Pro, o el Quicksilver Winter classic surf/snow.

Convertida ya en un Coloso del Surf, Quiksilver comienza su introducción en otros deportes extremos como el snowboard y el skate.

En 2004 consiguió una sólida posición en el mercado del skate adquiriendo la mítica línea de calzado para skaters DC  por 56 millones de dólares. 

Hoy día, Quiksilver está presente en los cinco continentes y divide sus departamentos en las tres áreas a las que se dedica: surf, snowboard y skate. Su logo, una ola y una montaña, abarca las dos ramas principales de la compañía, el surf y el snowboard, y está basado en la pintura La gran ola de Kanagawa de Ukiyo-e y Katsushika Hokusai.

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